Las soluciones de mantenimiento son utilizadas para realizar
una correcta higiene y cuidado de las lentes de contacto. Existen soluciones
con diferentes funciones específicas tales como limpieza, desinfección o
humectación, o soluciones únicas, que cumplen todas las funciones en un sólo
líquido.
En las lentes de contacto puede producirse una acumulación
de microorganismos y depósitos. Si no se eliminan, se acumulan en la superficie
de la lente y con el tiempo pueden dar lugar a una disminución de la comodidad
y de la visión, así como un aumento del riesgo de contaminación. Éste es el
motivo por el que las lentes deben someterse a mantenimiento con regularidad
mediante el uso de distintos tipos de soluciones, que no sólo son compatibles
con los materiales de la lente, sino también con el propio ojo.
El cuidado saludable de las lentes de contacto contribuye a
conservar la salud de los ojos.